jueves, 26 de marzo de 2015

LA MÚSICA COMO UN MEDIO DE EXPRESIÓN

La música hay que considerarla como un medio de expresión y cuyo elemento esencial de producción es el sonido al cual contribuyen el silencio y el tiempo. La música expresa esencialmente sentimientos, emociones y estados de ánimo.

Cuando estamos escuchando una pieza musical lo primero que percibimos es una sensación de movimiento o vida interna de la misma que puede reflejar tantas manifestaciones que puede ir de la grandiosidad a la alegría o a la tristeza, del heroísmo a la maldad, de la tranquilidad a la crueldad, a la nostalgia, la ternura, la fraternidad, el patriotismo, la humildad, el amor, emociones y estados de ánimo y sentimientos de todos los colores, sabores y tamaños habidos y por haber. Ante todo la música es un medio de expresión humana, pero no podemos atribuirle un concepto rígido, pues un sentimiento puede tener diversas fuentes que lo puedan originar. Tal es el caso de la alegría, la cual puede ser producto de muchos motivos, por ejemplo: haber obtenido algo deseado, asistir a una fiesta o celebración, ver nacer la libertad de un pueblo, haber conquistado un amor,  así también la tristeza puede tener muchos motivos, ser causada por muchos medios y tener razones diversas.

En cada uno de nosotros un mismo sentimiento repercute de múltiples formas o maneras de acuerdo con la sensibilidad de cada uno; de sentir cada uno de distinta manera que los demás.


Esto no quiere decir que no entendamos las demás manifestaciones humanas, sólo que para hacerlo será necesario considerar las causas y las circunstancias que los originan. 


domingo, 22 de marzo de 2015

LA GÉNESIS DE LA MÚSICA

No podríamos afirmar con exactitud la fecha cuando surgió la música pero si podemos señalar que existirá mientras exista el hombre, ya que la música no es producto de un invento o de un descubrimiento, sino que más bien es una función natural del hombre.
Para empezar remontémonos a la época primitiva del hombre cuando aún era un nómada y dependía de la naturaleza, era un momento en que todavía no se articulaba un lenguaje hablado. En un principio el hombre empezó sólo por satisfacer sus necesidades más apremiantes como lo haría cualquier animal. Pero, su capacidad de raciocinio poco a poco lo llevó a observar a la naturaleza que le rodeaba con mayor atención, encontrando en ella una inmensa diversidad de sonidos: el trino de los pájaros, el paso del viento en los bosques, el caer del agua, el choque de las piedras, los sonidos guturales de los animales, etc., de los cuales no se había dado cuenta y cuando se fijó en ellos recibió diversas sensaciones.
De esta observación surgió la idea de reproducir algunos de los sonidos por medio de lo que hoy conocemos como la onomatopeya o imitación de los sonidos. Nacen también los primeros ritmos primitivos que se producían con piedras, pedazos de madera o huesos de animales.




En la medida que ha evolucionado el hombre también lo ha hecho la música. Así a esos ritmos primitivos se añadieron los sonidos logrados por medio de la voz y con ello posteriormente se hizo la melodía en su forma elemental.

Después el hombre buscó producir sonidos que no fueran los ya conocidos sino otros nuevos y mas originales, apareciendo con ellos los instrumentos musicales primitivos como la sonaja, los tambores y los raspadores. De tal forma que conociendo el hombre algunos elementos constitutivos de la música no se conformó con imitar los sonidos de la naturaleza sino que los convirtió en un medio para expresarse.

Se cree que el origen de la palabra “música” se deriva de la palabra griega “musa” no tanto por su afinidad de vocablo sino porque en la mitología griega el coro de las nueve musas que eran dirigidas por Apolo estaban encargadas de conservar los cantos de unión de la poesía y la danza.